El universo de Adrià Cuernolobo es muy loco. Empezando por sus características máscaras, que nos transportan hasta los orígenes de alguna tribu indígena latinoamericana (eso sí, con un rollo moderno), y que mantienen al artista en el anonimato en las redes. De hecho, cuando le conocimos, no imaginábamos que era de la Barceloneta de toda la vida.
Seres salvajes, mucho color y alguna pócima mágica nos tienen fascinados.